La falta de medicinas y personal médico, son las necesidades a las que se enfrentan a diario las comunidades, más en las zonas rurales.
Entre días de inasistencias del médico de servicio social por razones de reuniones o capacitaciones, y la falta de variedad de medicamentos comunes; son las constantes quejas de los usuarios de la red de salud pública en las diferentes comunidades rurales en el departamento de La Unión; a lo que ellos, califican de “pésimo servicio y nada de mejoras”.
De acuerdo con la población las zonas más afectadas son los caseríos y cantones aislados de los servicios de un hospital, quienes aseguran que hay semanas donde solo un día llega el médico a dar consultas porque ha sido requerido a reuniones en regionales del Ministerio de Salud (MINSAL), en San Miguel, o en la cabecera departamental de La Unión.
Además, de la falta de medicamentos, en algunos centros de salud no cuentan con insumos para pequeñas curaciones. Y en algunos hospitales como en Santa Rosa de Lima, no logran cumplirles el tratamiento para algunos pacientes con enfermedades crónicas.
Vicenta Bonilla Escobar, miembro del comité de apoyo de las comunidades del cantón Guajiniquil del distrito de Lislique en La Unión Norte, dice que en el cantón solo el martes y jueves hay consultas porque no cuentan con médicos permanentes, “solamente en prácticas solo vienen dos veces por semana; luego con los medicamentos igual, cuando no hay aquí en Guajiniquil toca algunas veces esperar que exista o comprar”.
“En el año vienen dos doctores, como aquí vienen hacer las prácticas, terminando uno viene el otro; nunca hemos tenido un médico estable y el que está, cuando puede venir temprano lo hace y cuando no encuentra transporte desde Lilisque hasta la comunidad, viene llegando hasta las 12:00 a 1:00 de la tarde”, explicó Bonilla Escobar.
Francisco Medina, líder comunal del caserío El Pedernal, del cantón Guajiniquil, dice que en la clínica de la comunidad, cuando la medicina no está al alcance de la unidad, les hacen referencia para el hospital.
Yohana González, de la colonia Buena Vista, del caserío Los Corrales, del cantón El Ciprés, distrito de Conchagua, La Unión Sur, dijo que cuando no hay algunos medicamentos en las unidades de salud de las comunidades, las personas tienen que rebuscarse, es decir de conseguir el dinero y comprarlas.
Algunos empleados del Sistema Básico de Salud Integral (SIBASI), extraoficialmente manifestaron que en varias unidades del distrito de Pasaquina en La Unión Norte, como en el cantón San Felipe, hay falta de varios medicamentos entre esos: la amoxicilina, ácido fólico, vitaminas como hierro en tabletas entre otros insumos.
Santos Quinteros, líder comunal del cantón Las Tunas, en la zona costera de Conchagua, dice que no hay medicamentos, a los usuarios les dan las recetas para que ellos la vayan a comprar; el gobierno está diciendo que están abastecidos de medicamentos, incluso, de médicos y ni médicos hay, a veces son enfermeros los que lo atienden a uno”.
“Aquí en la zona desde el cantón Llano Los Patos, Loma Larga, La Brea, hacienda San Ramón, Las Tunas, Torola, en Playas Negras, Maculis, Playas Blancas y todas esas comunidades que ya le mencioné, se están quejando que no hay medicina y que no se les atiende como debe ser”, recalcó Quinteros.
Ruth Eleonora López Alfaro, jefa de Anticorrupción y Justicia, de la Fundación Cristosal, insta a la población a que se cuestione, a que no se conforme con la falta de acceso, que no normalice la corrupción, porque muchas veces los discursos de los funcionarios que pretenden hacer, es que la población normalice la corrupción, y la corrupción mata, afecta, vulnera derechos, “cuando yo no tengo un acceso adecuado en mi comunidad, cuando no tengo una escuela reparada, cuando yo no tengo una unidad de salud abastecida de medicamentos porque se desconocen los procesos en que se está gastando el pisto (el Estado)”.